Según informaron a Servimedia fuentes de Comercio, este periodo transitorio tendría por objeto proteger al pequeño comercio para que éste se prepare para volver a la situación de finales del año pasado, cuando los hipermercados abrían a su libre albedrío.

La Ley de Comercio irá acompañada de un Plan de Modernización del pequeño cmercio, que contempla la inversión de hasta 100.000 millones de pesetas en cinco años, entre financiación de las administraciones europeas, central y autonómicas, y de los propios pequeños comerciantes.

Este plan, cuya principal partida para 1995 está estudiándose para incluirla en los próximos Presupuestos, consistiría en planes de formación para los pequeños comerciantes, fomento del asociacionismo (con la creación de sus propias centrales de compra), e incluso jubilaciones anticipadas.

No obstnte, aún no está claro si el Gobierno va a redactar la Ley de Comercio mencionada o va a introducir sus enmiendas en la denominada 'Ley Roca', presentada por CiU y cuyo plazo de presentación comienza el próximo 6 de septiembre.

Las fuentes consultadas dijeron que la "voluntad política" del ministro Gómez Navarro es presentar su propio texto, pero todavía está pendiente la negociación de este tema con los nacionalistas catalanes.

En la Ley de Comercio todavía no hay acuerdo sobre el periodo transiorio hasta el 2000, ya que la Mesa del Comercio, que engloba a los pequeños comerciantes, quiere mayor limitación, mientras que las grandes superficies se oponen a cualquier restricción.

En cambio, sí han quedado pactado los plazos de pagos. En principio, hay libertad entre las partes para fijar el tiempo que consideren oportuno, pero este acuerdo deberá fijarse mediante un pagaré o título cambiario, de forma que si los hipermercados lo incumplen, paguen intereses por los retrasos. A su vez, las indusrias podrán descontarlo previamente en una entidad financiera si necesitan el dinero.

El Ministerio de Comercio también quiere que la nueva Ley englobe las nuevas fórmulas comerciales que se están produciendo y que pueden causar indefensión al consumidor o competencia desleal, como las ventas a pérdida, la ventas por correo o telefónicas.

MADRID

Por otro lado, las fuentes mencionadas indicaron que la nueva Ley no recogerá un tratamiento más detallado de lo que se considera zona turística, para eitar problemas como los que se están produciendo en la Comunidad de Madrid, en los comercios de la Sierra.

Comercio cree que la regulación debe ser del Gobierno Regional, ya que es el encargado de establecer en detalle lo que se consideran excepciones. Además, a su juicio, el caso de Madrid es "excepcional" y sólo se han planteado dificultadades en esta comunidad autónoma.

En contestación de las palabras de Leguina, que ha dicho que el Ministerio de Comercio les ha pasado "esta patata caliente" yha pedido una nueva regulación, las fuentes de Comercio consultadas aseguraron que "Madrid distorsiona el decreto por su escaso arraigo cultural y la costumbre de encontrar siempre abiertos los hipermercados en festivos" y reiteraron que este tema debe solucionarlo la Comunidad de Madrid.