En declaraciones a Servimedia, Vidal-Quadras aseguró que el anteproyecto es "una barbaridad" y "atenta de forma tan clara contra la racionalidad", que no tiene ninguna posibilidad de salir adelante y ser aprobado.

Para Vidal-Quadras, lo desafortunado de este texto legal se prueba por las discrepancias surgidas sobre este tema entre Pujol y el líder de Uniò Democrática de Catalunya, Josep Antoni Duran Lleida.

"Es algotan delirante", afirmó, "que hasta el propio socio del señor Pujol ha tenido que salir al paso, porque se da cuenta, con buen criterio, que eso conduciría a un conflicto innecesario en la sociedad catalana, y llevaría a la coalición (CiU) a hacer el ridículo".

En opinión del ex presidente del PP catalán, diversos aspectos del anteproyecto, como la necesidad de que cualquier comercio deba tener un dependiente que hable en catalán, "atentan contra la pura racionalidad" y, además de no responder a la reaidad catalana, "rozan el absurdo".

Según Vidal-Quadras, Pujol intenta "utilizar su capacidad de decisión en las Cortes Generales para dar una vuelta de tuerca a su viejo delirio de monolingüizar Cataluña".

Para el señador popular, el anteproyecto será retirado por la Generalitat, ya que no tiene posibilidad de ser aprobado en el Parlamento catalán. "Es inviable", aseguró.

Sobre la posibilidad de recurrir al Tribunal Constitucional en caso de ser aprobado este texto legal, Vidal-Quadras dijo ue cree que no será necesario, porque está convencido de que será retirado. No obstante, concluyó, "si se empeñan en mantener eso van a llevar a la sociedad catalana a un conflicto y a un callejón sin salida".