Angeles Amador puntualizó que hay que promover ayudas para las mujeres que las precisen, pero, a su juicio, "no puede considerarse una prioridad del Sistema Nacional de Salud".

"Los tres supuestos que hoy están despenalizados es obvio que deben ser prestaciones del Sistema Nacional de Salud y que, en cambio el supuesto de libre decisión no tiene que ser necesariamente una prestación del sistema", dijo.

La ministra reconoció que la interrupción voluntari del embarazo es una cuestión muy difícil. "Respeto todas las posiciones, pero estoy a favor de la propuesta del Gobierno, que es una solución a un problema social, que da respuesta eficaz, y que es cuidadoso con los valores que hay que preservar constitucionalmente".

En su opinión, el Ejecutivo da una respuesta a las mujeres que se encuentran en una situación dramática de interrumpir su embarazo "y hay que dar una respuesta en condiciones de seguridad, de tutela del Estado a los valores constitucionaes, y en condiciones de dignidad y respeto a la decisión de la mujer".