El atentado fue cometid sobre las 8,10 de la mañana, junto al supermercado "Jumbo", situado en la Avenida de Pío XII. Un vehículo "Renault" de color blanco, posiblemente robado días antes, que estaba estacionado junto al aparcamiento del centro comercial, hizo explosión al ser accionado a distancia cuando pasaba por la calle Madre de Dios un furgón camuflado de la Marina.

Los militares, que habían sido recogidos por el vehículo en sus viviendas, se dirigían, como todas las mañanas, a unas instalaciones de la Armada situadasa poca distancia del lugar del atentado, en la calle Pío XII. Al parecer utilizaban siempre la misma ruta.

A los pocos minutos de la explosión, la zona fue acordonada por las fuerzas de seguridad. Asimismo, se trasladaron al lugar varios técnicos en desactivación de explosivos (Tedax), ante la posibilidad de que hubiera otro coche-bomba en las inmediaciones.

Los heridos, algunos de los cuales fueron asistidos en el lugar de la explosión, fueron trasladados posteriormente a diversos centros sanitaios.

A la Policlínica Naval fueron llevados el capitán de navío Miguel López Nuche, el capitán de fragata Juan Antonio Muñoz Roig y el teniente coronel de Infantería de Marina Manuel Aldereguía Couceiro. Los tres están graves y fueron visitados por el Ministro de Defensa, Julián García Vargas.

Otros tres militares fueron trasladados al Hospital Ramón y Cajal. Se trata de Antonio Vicente López Cao, Francisco Javier Reino González y Francisco Pérez García. Este último, de 19 años, es el soldado queconducía el vehículo. En este mismo centro está ingresada Arancha Higuero Cabanach.

Otras seis personas fueron asistidas en el Hospital La Paz. Entre ellas figura una mujer, Lourdes Ortega Maleta, que resultó herida grave al ser alcanzada por la onda expansiva.

El resto de los heridos ingresados en este centro sanitario son Manuel Blasco Siegrit (funcionario del Cuerpo Nacional de Policía, herido leve), Antonio Villaverde Malbares (comandante archivero, grave), Luis Blázquez Buyo (teniente corone, leve), Cándido Pousada (capitán de navío, leve) y Antonio Barreda (capitán de fragata, menos grave).

JUNTO A UNA GUARDERIA

A los pocos minutos de ocurrir el atentado se trasladaron al lugar del atentado varios responsables gubernamentales y municipales, entre ellos el delegado del Gobierno, Segismundo Crespo, quien declaró que el coche-bomba estaba cargado con gran cantidad de metralla de gran tamaño, que alcanzó directamente al furgón militar.

La explosión, de gran potencia, fue escuchada a astante distancia y produjo daños en vehículos aparcados en las inmediaciones y en edificios colindantes, cuyos cristales quedaron hechos añicos. El coche-bomba resultó completamente destruido y sus piezas quedaron desperdigadas en un radio de cien metros.

El escenario abierto del atentado, donde hay un gran aparcamiento perteneciente al supermercado y un pequeño parque, evitó que la explosión del coche-bomba produjera efectos más devastadores, como ocurrió en la Plaza de la Cruz Verde, según recordó l alcalde, José María Alvarez del Manzano, que también se trasladó al lugar del atentado y posteriormente a la Policlínica Naval.

A pocos metros del lugar donde estaba colocado el vehículo cargado de explosivo hay una guardería, un polideportivo y el colegio público Santa Cristina, cuyos alumnos entraron en las aulas a las ocho de la mañana, aunque no resultaron afectados por la explosión.

Tampoco sufrieron heridas los trabajadores del centro comercial "Jumbo", que se encontraban en el momento de estallido dentro del supermercado. Según relató una de las empleadas, Raquel Delgado, la explosión derribó parte del acceso al centro y tiró gran cantidad de productos de las estanterías, aunque no llegó a desprenderse ningún elemento del techo o de las paredes.

El delegado del Gobierno indicó que todos los indicios apuntan a que el atentado es obra de la banda terrorista ETA, que, a juicio de Crespo, cuenta con un grupo de apoyo en Madrid que suministra información para cometer los atentados.

Sgismundo Crespo no supo precisar si los "comandos" que actúan en Madrid son fijos o se trasladan desde otros puntos del país para cometer sus acciones.

Asimismo, aseguró que es "aventurado" afirmar que los terroristas actúan preferentemente en unas zonas de la capital, como parece indicar la concentración de atentados en el área de Aluche, ya que, señaló, el de hoy ha sido perpetrado en las antípodas de esa zona.

Finalmente, indicó que a pesar de los golpes dados por las fuerzas de seguridad a lainfraestructura de ETA, el Gobierno jamás ha excluido la posibilidad de que la banda terrorista cometa más atentados, ya que les queda capacidad operativa, puesto que estas acciones pueden ser perpetradas por una o dos personas.

INFRAESTRUCTURA ETARRA

El atentado de hoy, que se produce sólo 4 días después de que el PNV y HB iniciaran las conversaciones "políticas" para buscar una salida a la violencia, refuerza la hipótesis policial de que ETA dispone aún de un "comando" estable en la capital o al mnos de un "comando" itinerante con suficiente infraestructura, a pesar del descabezamiento de la cúpula terrorista.

ETA cumple con esta acción su amenaza de mantener "abiertos todos los frentes", a pesar de considerar, en un comunicado hecho público la semana pasada en "Egin", que las conversaciones PNV-HB pueden ser positivas para buscar una salida dialogada a la situación.

Además, parece que la banda pretende demostrar que puede reaccionar ante los últimos reveses sufridos, que prácticamente ha dejado sin dirección a la organización terrorista. Ya se trate de un "comando" estable o de un grupo itinerante, lo que parece claro es que los etarras tienen "pisos de seguridad" en Madrid o en localidades próximas.

El atentado de hoy es el primero que ETA comete este año contra personal de la Armada. Durante 1992, los etarras han hecho estallar siete coches-bomba, tres de ellos en Madrid y cuatro en otros lugares del país.

La última acción de este tipo fue el 24 de mayo en la capital, cuando ls terroristas activaron un vehículo explosivo en las proximidades del Estadio Vicente Calderón, al paso de una dotación del Cuerpo Nacional de Policía. En el atentado resultaron heridos siete policías y dos transeúntes.

El lugar elegido hoy por los terroristas se encuentra muy próximo a la plaza de la República Dominicana, donde ETA cometió uno de sus atentados más sangrientos, el 14 de julio de 1986, contra tres vehículos de la Guardia Civil. A consecuencia de la explosión murieron en el acto nueve aumnos de la Agrupación de Tráfico de la Benemérita y otros tres fallecieron posteriormente a causa de las heridas.