Según fuentes de esos retenes, de los dos siniestros, el más grave comenzó a las tres y media de esta madrugada en Soportuja.

Hasta esa localidad, se desplazaron doce equipos del Instituto Andaluz de Refoma Agraria (IARA), de la Agencia de Medio Ambiente (AMA), y voluntarios, que fueron llamados a toque de campana de las iglesias de las localidades vecinas.

Además, intervienen en las labores de extinción de los dos incendios efectivos de Protección Civil de Motril y de la Guardia Civil, así como dos hidroaviones con base en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Aunque a esa hora no había viento en la zona, los técnicos del Centro de Control de Incendios de Granada mostraron su preocupación por la rapidezcon que el fuego se estaba propagando.

SINIESTRO PROVOCADO

Por otro lado, ayer se conoció que el siniestro que arrasó la mayor parte del monte bajo, de repoblación de pinos, encinares y el matorral en el valle del Andarax, en la Alpujarra almeriense, fue provocado, según reveló el consejero de Agricultura del Gobierno andaluz, Leocadio Marín.

Marín detalló cómo el fuego comenzó el miércoles simultáneamente en cinco focos distintos, que tardaron en ser controlados por las dificultades que las 50 personas que participaron en su extinción encontraron para acceder a la zona.

El incendio, que en algun momento llegó a tener un frente de unos 12 kilómetros, quemó el que se considera como un auténtico "pulmón vegetal" de la provincia de Almería, según expertos del IARA, porque esta es una de las zonas más afectadas por el proceso de desertización de la península.