Según informó el banco este lunes, los 4,6 millones de kWh ahorrados equivalen al gasto de 1.300 viviendas y se han logrado con reformas integrales en la red de sucursales, la renovación de los equipos de climatización y la adecuación de los equipamientos de refrigeración y suministro eléctrico de las tres instalaciones de procesamiento de datos.

En concreto, se han mejorado envolventes térmicas, se han instalado sistemas de control de iluminación y de aprovechamiento de la luz natural, se han colocado vidrios de baja emisividad térmica y aislamiento acústico y se han sustituido las carpinterías por otras de mejor perfil térmico.

Kutxabank está implantando en la actualidad un proyecto global en su red de sucursales, que ya ha sido probado en los edificios centrales, con un conjunto de tecnologías que permiten la gestión remota, eficaz y automatizada de los sistemas de climatización, iluminación y del consumo energético. Este sistema ahorró en 2022 un total de 161.000 kWh de electricidad.

En cuanto a la limitación de las temperaturas de la calefacción y del aire acondicionado, medida decretada por el Gobierno en el mes de agosto, supuso un ahorro de 654.000 kWh.

A pesar de que el volumen de emisiones directas que genera Kutxabank no es muy elevado, éstas son compensadas con la masa forestal que gestiona. Así, el banco tiene en propiedad una superficie total de 850 hectáreas de bosque, ubicadas en Vizcaya y Guipúzcoa.