En declaraciones a la Cope, Trillo reiteró que el uranio empobrecido "no es, de momento, causa directa de una de las enfermedades que se están imputndo a quienes han estado en los Balcanes".

No obstante, en relación con una información que señalaba que no había aparecido ningún caso entre los soldados americanos e ingleses por haber estado medicándose de manera preventiva, alertados por el riesgo de padecer la enfermedad, el ministro español aseguró: "Puedo garantizar que nuestras unidades han viajado siempre con todas las prevenciones y todas las vacunas".

Asimismo, señaló que, aun suponiendo que los efectos del uranio empobrecido desprendio de las municiones empleadas durante los bombardeos en Kosovo tuvieran efectos perniciosos sobre la salud humana, "nuestros soldados no han estado en zonas donde se hayan utilizado", razón por la cual se hace improbable vincular los casos detectados en España con tal fenómeno.

Por lo demás, criticó las "informaciones alarmistas" difundidas en relación a esta cuestión en los últimos días y aseguró que los más de dos mil soldados españoles que permanecen destinados en la zona "están mucho más tranquilo que aquí (en España)".