Durante el año pasado, el MOPTMA adjudicó, según el avance de ejecución de su presupuesto, un total de 795.680 millones de pesetas en licitaciones oficiales, de los que sólo 4.400 corresponden a sus organismos autónomos.

Ello supone el record por segundo año consecutivo desde 1989, en el valor de contratos adjudicados por este ministerio, y un aumento respecto a 1993 del 3,3 por cie, equivalente a unos 25.103 millones de pesetas.

El grupo industrial de Alicia y Esther Koplowitz obtuvo contratos del MOPTMA el año pasado por valor de 62.500 millones de pesetas, lo que supone el 11,27 por cien de las adjudicaciones de obras cedidas a constructoras.

Le siguieron a muy poca distancia las empresas y filiales del Grupo Dragados, con 62.047 millones de pesetas, el 11,19 por cien; Ferrovial, con 45.400 millones; y Cubiertas y MZOV, con casi 40.200 millones.

En el quinto puesto,con casi 29.600 millones, se situó el grupo constructor Ginés Navarro, con su filial Vías y Construcciones, debido a los importantes contratos logrados por esta firma en las licitaciones de infraestructuras ferroviaria como consecuencia de las prioridades del Ministerio para 1995 en este sector. El inicio de licitaciones ferroviarias ha colocado a esta filial de Gines Navarro entre las diez empresas que más contraron con el MOPTMA el año pasado.

Otros grupos constructores de prestigio con resultados ms modestos en sus contrataciones con el Gobierno fueron Huarte, con 23.500 millones; OCP Construcciones, con 23.000 millones; Sacyr, con 18.433 millones; Auxini, con 17.000; y Agroman, con cerca de 16.500 millones.

Aunque la lista de empresas constructoras que contrataron con el MOPTMA por encima de los 1.000 millones de pesetas se extiende hasta las 42, sólo las cinco primeras concentraron en 39,6 por cien de las adjudicaciones, y entre las 10 de cabeza acapararon el 56 por cien del valor de los contatos adjudicados.

LAS CIFRAS

Para 1994, el MOPTMA contaba con un presupuesto inicial de 1,272 billones de pesetas, pero los suplementos de créditos o los extraordinarios solicitados a las Cortes en algunos proyectos, por un importe de 76.692 millones, han dado lugar a un crédito final de 1,349 billones de pesetas, de los que se han dispuesto 1,334 billones. De esa cantidad, 1,217 billones son obligaciones ya reconocidas por el Ministerio.

Por programas de gasto, las licitaciones y contratos en arreteras han sido las que más dinero se ha llevado, 480.000 millones sobre un objetivo inicial de 440.000, mientras que Obras Hidráulicas contaba con 210.000 millones, de los que sólo se han cubierto 149.000 millones.

Según explicó Llardén, el motivo de estas diferencias es la orden dada por el ministro Borrell a primeros de año de que no se saque a concurso y licitación ni un contrato que no tenga resuelto el problema de impacto ambiental, con su informe correspondiente, con el fin de evitar deslizaiento en el presupuesto posteriores como consecuencia de los debates orginados por este aspecto.

El hecho de que Carreteras dispusiera de más proyectos que Obras Hidráulicas con el impacto ambiental resuelto ha motivado que su licitación se disparase, mientras la Hidráulica se restringía, beneficiando a las anteriores, a las obras Ferroviarias que llegaron hasta 95.000 millones y al resto de departamentos, como Costas, Calidad de Aguas, Carreteras, Vivienda, etc, que sumaron otros 67.000 millones.

En el 94, el MOPTMA endureció el "criterio de temeridad" que recoge la Ley de Contratos del Estado para asegurarse el cumplimiento del contrato en los términos acordados.

Este criterio consiste en descartar de la licitación cualquier proyecto cuyo presupuesto esté un 10 por cien por debajo de la media de ofertas enviadas al Ministerio, el cual redujo ese límite al 5 por cien. Ello ha supuesto que el nivel de bajas registrada por el Ministerio en sus licitaciones haya pasado del 40 por cien en 1993 al30,3 por cien en 1994.