Los hechos se produjeron en el pasado ramadam mes segrado para los seguidores de la religión musulmana, cuando el individuo supuestamente agredido, entonces presidente del colectivo de inmigrantes marroquíes en Andalucía, acudió a la delegación diplomática a realizar algún trámite.

Una vez allí, Mustafá A. fue recriminado por el personal consular y el propio cónsul por estar fumando un cigarrillo, circunstancia prohibida durante las horas diurnas en el Ramadam. Según la denuncia presentada por Mustafá A., el cónsul de Marruecos le agredió.

pesar de los requerimientos efectuados por el Juzgado que instruye el caso, Kalif El Bay no ha comparecido voluntariamente ante el juez, por lo que ayer la Policía Nacional se vio en la obligación de acompañarle para que prestara declaración.

Un portavoz del Gobierno Civil de Málaga ha restado importancia al suceso, al asegurar que Kalif El Bay desatendió los llamamientos judiciales al considerar que "el consulado es territorio marroquí y entiende que un juez español no tiene competencias en este asuto".