Estos datos comprenden los delitos cometidos tanto por militares profesionales como soldados de reemplazo. El año negro de la corrupción militar fue 1989 cuando la Fiscalía tuvo que abrir 178 expedientes. En 1988 se produjeron 87 casos de corrupción, 128 en 1990, 166 en 1991, 152 en 1992 y 131 en 1993, según la respuesta del Ejecutivo, que no precisa la cuantía del perjuicio económico causado a las Fuerzas Armadas.

En el mismo periodo de tiempo, la mayor parte de los procedimientos abiertos por la jurisdicción militar, un total de 3.337, tuvieron que ver con delitos de deserción. A continuación figuran los delitos de abandono de destino o residencia ( .071); insulto a un superior (1.028); desobediencia (397); y contra la eficacia en el servicio (306), entre otros.

EL COBARDE

Asimismo, la Fiscalía Togada Militar procesó en 1990 a un militar por el delito de cobardía. Entre 1988 y 1993 no se reprodujo ningún otro caso de un militar que fuera procesado por ser un cobarde.

Por revelación de secretos fueron procesados 5 militares, y 192 acusados de agresiones contra medios materiales, autoridades militares, ultrajes a la Nación o a sus símbolos,injurias a los Ejércitos.

A 57 militares se les investigó por presunta deslealtad a las Fuerzas Armadas y 409 incurrieron en un delito de abuso de autoridad y 43 de extralimitación en el ejercicio del mano. 24 militares fueron acusados de sedición y 306 por ineficacia en el servicio.

ALCOHOL

La jurisdicción militar juzgó asimismo a un centenar de militares acusados de embriaguez en acto de servicio, un tipo de conducta irregular que ha causado recientemente gran alarma social al trascender a l opinión pública el caso del srgento Juan Carlos Miravete, que mató de un disparo, cuando estaba borracho, a un soldado en el cuartel de Esquiadores-Escaladores de Candanchu.

Por el contrario, ningún miembro de las Fuerzas Armadas fue acusado en ese periodo de tiempo de "derrotismo", traición militar, espionaje, desobediencia a bandos militares, o usurpación de deberes.

Otro informe, contenido en la citada respuesta parlamentaria, informa que el número de militares condenados entre 1982 y 1987 asendió a 5.480, pertenecientes al Ejército de Tierra, del Aire y la Armada.

También indica que entre 1982 y 1993 había 1.902 militares internados en prisiones militares. En ese mismo periodo se habían instruido 1.734 causas y se contabilizaban 3.040 militares encerrados en centros disciplinarios.