En opinión de JpD, "el Pacto de Estado sólo merece un certificado de defunción. A su amparo, el gobierno está amedrentando a los tribunales, a los que descalifica siempre que adoptan una decisión incómoda para los gobernantes, todo ello ante la pasividad del CGPJ, cuya mayoría conservadora actúa como correa de transmisión de las tesis del Partido Popular, y del PSOE, que ha permanecido indferente y pasivo ante tal instrumentalización".

En un comunicado, JpD reclama "medidas para poner fin a la actual situación de ataques a la independencia judicial procedentes del poder" y propone "recuperar los valores constitucionales que deberían caracterizar la actuación del Poder Judicial y la prestación del servicio por la Administración de Justicia".