JUNTA SANTANDER. EL BENEFICIO DE LA MATRIZ CAYO 8.000 MILLONES EN 1994
- Descienden todos los cocientes de rentabilidad del prier grupo bancario español
- Las cuentas de Banesto ya no se presentarán integradas en las del Grupo Santander a partir del próximo año
- El Santander creará un banco telefónico llamado Openbank
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El beneficio del Santander S.A., matriz del grupo bancario de mayor volumen del país, presentó unos beneficios en 1994 menores a los de 1993. Así, en el año vencido, la entidad consiguió 78.077 millones de pesetas, frente a los 85.921 millones del ejercico anterior.
También disminuyeron todos los concientes de rentabilidad del Grupo Santander-Banesto, que tras la adquisición del Español de Crédito ha sufrido la consiguiente merma en sus resultados.
El descenso del beneficio antes de impuestos, en cifras absolutas, se corresponde con el desastre que para todos los grandes grupos bancarios españoles ha significado la inversión en deuda pública durante 1994.
Así, si en 1993 el grupo obtuvo por operaciones en deuda con contenido arriesgado unos 5.531 millones de pesetas, en 1994 esa cifra se convirtió en unas pérdidas de 5.160 millones.
No obstante, el márgen financiero de la matríz del Santander aumentó al pasar de 141.499 millones de pesetas a 275.386 del ejercicio del 94. Buena parte de estos resultados se deben a la comisión de un producto estrella en España, del que el Santander es líder: los fondos de inversión, en los que, con un cálculo a la baja de la comisión del 1,5 por cien, el banco habría obtenido cerca de 30.000 millones de beeicios por este concepto.
Más preocupante ha sido que todos los coeficientes de rentabilidad del grupo banacario tienden a la baja. Así el ROE, es decir, el beneficio medido sobre los recursos propios medios, pasó del 20,35 en el 93, al 16,45 del 94. En los mismo términos, la rentabilidad del total del balance (ROA) disminuyó y pasó del 0,96 de 1993 al 0,82 de 1994.
En la misma línea, el Per bursátil del Santander aumentó, es decir, fue a peor, al pasar del 11,23 al 12,84. También desciende la reación entre costes e ingresos, que pasa del 56,74 al 62,49.
Queda incluso una medición de rentabilidad más que también dermina el "año negro" que 1994 ha supuesto para el grupo que preside Emilio Botín.
Se trata del resultado de explotación por empleado, es decir, el negocio típico por cada trabajador, cayó del 6,66 millones de pesetas en 1993 a 3,91 millones en el 94, y si se miden resultados por oficinas, también hay una rebaja de 79,09 millones a 54,90 millones, respectivamente. En definitiva,el impacto de Banesto se deja entrever.
Sin embargo, las cifras de beneficio, globalmente consolidadas, mejoran si se añade el efecto Banesto al efecto del Grupo Santander. Esta aparente contradición tiene mucho que ver con los casi 350.000 millones de pesetas en activos morosos que se han reunido en la llamada sociedad de gestión de activos, una empresa en la que Banesto ha metido casi todos sus "agujeros", con permiso del Banco de España, y que tendrá que ir liquidando poco a poco en los próximos cutros años, posiblemente, con ventas de industrias.
El Grupo Santander, a través de su vicepresidente segundo, Matías Rodríguez Inciarte, ha asegurado que el próximo año ya no se derán cifras de Banesto. El Santander quiere subsumir la banca adquirida dentro de su cultura y su espiritu, y auqnue comercialmente siga funcionando como independiente, sólo se ofrecerán cifras consolidadas.
El dividendo ha disminuido al pasar de las 292 pesetas por acción en el 93, a 260 en el 94. Sin embargo, el dividedo globalmente considerado ha aumentado un 8 por cien. La diferencia entre ambas cifras que es mayor el número de acciones en circulación.
Para Emilio Botín, que se dirigió hoy en Santander a los accionistas de su banco, 1994 ha sido, no obstante lo anterior, un buen año. Para el primer banquero del país, el banco español ha ganado en "servicio, rentabilidad y solvencia respecto a la media de Eruopa con la que es perfectamente comparable y a la que incluso superamos".
Por tres veces felicitó al Bnco de España por su actuación en la crisis de Banesto, así como por la "celeridad y transparencia" utilizada para solventar dicha crisis.
Botín negó nuevamente que tuviera vocación industrial, y pese a las protestas de algunos sectores del Gobierno aseguró que seguirá vendiendo industrias y esto "es especialmente claro cuando hablamos de medios de comunicación".
También anunció la creación del "Openbank", un banco telefónico dedicado a un segmento concreto de clientes identificados por su poder dquisitivo medio o medio-alto.
Por ultimo, dió dos "avisos para navegantes". Por un lado, pidió que se reforme el actual sistema de pensiones, apostando claramente por su sustitución por sistemas de capitalización, y al mismo tiempo una alusión a la política: "Los acontecimientos que vive nuestro país no crean el clima necesario para invertir".
Y por si no había quedado claro el caracterpesimista de su discurso respecto a lsas posibilidades de la economía española, lanzó esta otra perla: "La interación en Europa sólo será un deseo si no se afrontan las correspondientes reformas económicas".
(SERVIMEDIA)
18 Feb 1995
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