En Extremadura funcionan unos 17.500 tractores que en los últimos 20 años han dado lugar a 97 accidentes por vulco, a consecuencia de los cuales han muerto 61 personas y otras 35 resultaron heridas de carácter grave o muy grave.

Estas cifras se refieren a accidentes laborales, es decir, a personas empleadas por cuenta ajena, aunque la mayoría de ellos los sufren agricultores autónomos. En lo que va de año han ocurrido 3 accidentes mortales, de los cuales sólo uno de los fallecidos era asalariado.

La maquinaria de los tractores suele estar bien conservada, pero su punto débil es la falta de homologación desus cabinas de seguridad, factores que en caso de vuelco contribuyen al aplastamiento del conductor o a que éste quede atrapado.