El Gobierno regional, que ha denunciado el hecho en coordinación con las inspecciones de Transporte de estas tres provincias, ha dado a las tres empresas piratas el plazo de una semana para que dejen de llevar a cabo servicios irregulares, para los que no tienen licencia, o de lo contrario se procederá a sellar los autobuses .

La denuncia afecta, además, a los establecimientos en los que se despachaban los billetes para los recorridos que realizaban estas empresas, anto en Castilla-León como en el resto del territorio nacional.

Estas denuncias, reconocidas por el jefe de servicio de Fomento de la Junta, Pablo Arribas, surgen poco después de que el Gobierno regional negara irregularidades en la Comunidad Autónoma, tras el accidente del autobús de Bus Expres en Torreblanca (Castellón), que costó la vida a casi medio centenar de personas.

UGT de León denunció públicamente, tras este accidente, decenas de irregularidades en los servicios discrecionales de transorte de pasajeros que cruzan esta comunidad autónoma, la más extensa de España.

Entre estas irregularidades, negadas en aquel momento por el Ejecutivo regional, se encontraban, tanto la carencia de tarjetas como la caducidad de permisos de conducir, el exceso de pasajeros y los autobuses que no habían pasado la revisión de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).