Arranz, que presentó hoy en Soria el plan, explicó que esta cantidad supone más del doble de la aportación que hará la Administración central, que alcanza la cifra de 16.500 millones de pesetas para un total de 23.000 viviendas.

Para este año se han establecido 8.800 millones de pesetas para la finaciación de 4.200 hogares en la región, de los que 1.500 serán para promocionar los de carácter social. Arranz precisó que la próxima semana se firmarán los protocolos de acuerdo con las entidades bancarias de la región.

A pesar de que la campaña electoral del Partido Socialista en los comicios municipales tuvo como eje principal el Plan de Vivienda, Arranz no quiso enjuiciar los resultados, a la vista de la distinta participación de cada una de las administraciones. "El movimiento se demuestra andando No hace falta aplicar epitetos", dijo.

Respecto a las viviendas sociales terminadas en 1991, Castilla y León ocupa la cuarta posición, con 631. Andalucía, con 6.000, es la primera del "ranking".

Este plan prevé también subvenciones personales para arrendatarios de viviendas en municipios de más de 10.000 habitantes destinadas a disminuir la renta o precio del alquiler. Esta experiencia podría ser copiada por otras comunidades autónomas.