Estos planes cuentan con un presupuesto de 1.943 millones de euros y contribuyen al empleo con 35.000 puestos de trabajo directos.

El Plan Estratégico del Sistema de Acción Social contempla la vertebración de dicho sistema, la adaptación de los recursos a las necesidades y la potenciación del conocimiento como recurso.

Del mismo modo, el Plan de Atención a las Personas Mayores incluye la potenciación del envejecimiento activo, la mayor importancia de los aspectos preventivos, el incremento del apoyo a familias y el desarrollo de los recursos de atención a la dependencia.

Por su parte, el Plan de Atención a las Personas con Discapacidad contempla medidas para reforzar el acceso a la formación y al empleo como fórmula fundamental de integración social y mecanismos de creación y refuerzo de servicios y centros, priorizando la permanencia del discapacidado en su entorno.

En cuanto al Plan de Atención y Protección a la Infancia, incluye la mejora de los mecanismos de protección a los niños, el apoyo a las familias acogedoras y solicitantes de adopción y el perfeccionamiento del Sistema de Reforma de Menores.

Finalmente, el Plan de Acciones para la Inclusión Social recoge aspectos como el empleo y la atención especial al fenómeno de la feminización de la exclusión.