Igleias, que actualmente realiza una gira de conciertos por toda Europa, realizó una visita relámpago de dos horas a Madrid, que aprovechó para grabar en los estudios de la Ser un programa especial para la Cadena Dial sobre el lanzamiento del nuevo LP.

El cantante vestía un pantalón blanco, chaqueta azul con corbata a juego y sus ya habituales mocasines rojos. Tras la grabación del espacio de Cadena Dial, mantuvo una entrevista con Javier Sardá en el programa "La Ventana" de la Ser.

Escuchó con gran nterés "La carretera", "Agua dulce, agua salada", y "Baila Morena", tres de los temas del disco, que saldrá a la venta a finales de este mes, porque, según dijo, era la primera vez que los escuchaba a través de la radio y quería comprobar la calidad del sonido.

Julio recibió llamadas de los oyentes, incluida su antigua productora, Miriam, que le deseó la misma suerte con este nuevo disco que con el que paseaba bajo el brazo en el año 1969, "La vida sigue igual".

El también recordó sus comienzos yevocó la tarde en la que hizo cola en los estudios de Radio Madrid, esperando el turno para poder tocar con su guitarra. "Siempre había soñado con volver a los sitios en los que empecé mi carrera", comentó.

Negó estar disgustado por la separación matrimonial de su hija Chábeli y aseguró que "no existe ningún problema grave, aunque a nadie le gusta que los críos tengan problemas". Añadió que no quería entrar en más detalles sobre los aspectos emocionales de la vida de su hija, "porque son muy personale".

Después de la entrevista con Sardá, volvió a los estudios de Cadena Dial para concluir el programa y se marchó de España tan fugazmente como había llegado, emprendiendo viaje en su avión privado hacia Eslovenia, donde continuará la gira.