Según informa hoy el diario "The Times", el magistrado hizo estas consideraciones ayer, en la conclusión de los tres días de juicio en el distrito sur de Manhattan (Nueva York) sobre la publicación de una enciclopedia no autorizada, editada por RDR Books, que J.K. Rowling considera "un robo al por mayor de 17 años de trabajo duro".

El juez de distrito Robert Patterson le comentó a J.K. Rowling que había leído la primera parte del primer libro de la serie de Harry Potter a su nieto y encontró que "el mundo mágico era difícil de seguir, lleno de extraños nombres y palabras que serían un galimatías en cualquier otro contexto".

"Lo encontré extremedamente complejo", aseguró el magistrado, en un comentario que "The Times" interpreta como una indicación de que el juez puede pensar que una guía para entender a los personajes de "Harry Potter" resulta útil.

J.K. Rowling insistió en que es completamente contraria a la censura y una defensora incondicional del derecho de los autores a escribir sus propias obras. Pero aseguró también que el autor de la enciclopedia cuya prohibición pide se ha limitado a "saquear" los libros de "Harry Potter" dándole un formato de enciclopedia que explica de la "A" a la "Z" las historias del joven mago.

La decisión judicial del caso se hará esperar semanas y le corresponderá, no a un jurado, sino al propio juez Patterson.

La enciclopedia impugnada por J.K. Rowling consta de 400 páginas y ha sido escrita por Steve Vander Ark, un antiguo bibliotecario escolar. Se titula "The Harry Potter Lexicon" y está basada en un sitio de Internet del propio Vander Ark para los fanáticos de "Harry Potter".