EL JUEZ SOBRESEE EL "CASO WINDSOR" AL NO ENCONTRAR"INFRACCION PENAL" EN EL ORIGEN DEL INCENDIO ====================================================== (ESTA NOTICIA AMPLIA LA NUMERO 49 DEL SERVICIO DE HOY) ======================================================
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El juez de instrucción del Juzgado número 28 de Madrid, Mariano Ascandoni, decidió hoy el sobreseimiento del caso sobre las causas que provocaron el incendio que destruyó el edificio Windsor el 12 de febrero de 2005, al "no aparecer debidamente justificada la perpetración de infracción penal".
En el auto, el magistrado dice que el incendio se originó en un "solo foco primario de fuego, situado en la planta 21 despacho 2109", en el que estaba una empleada de la empresa Deloitte que reconoció estar fumando.
El juez señala que no hay indicios de que el incendio fuera intencionado, por lo que "procede analizar si cabe atribuir su origen y/o propagación a la acción u omisión imprudente de alguna persona".
El magistrado indica que, "pese a que la destrucción producida no permita asegurar cuál fuera el punto exacto donde se originó el incendio", las declaraciones de los vigilantes y personal de mantenimiento "permiten colegir que, en principio, tuvo lugar en el despacho 2.109 de la planta 21".
En cuanto a la magnitud que alcanzó el incendio, el juez dice que se produce por la "abundancia de papeles y archivos, muebles de madera, cableado diverso, paneles sintéticos de separación entre los despachos y la zona de pasillos, suelos de moqueta y falsos techos en el interior de los cuales había gran cantidad de cableado con sus respectivas fundas de material sintético o similar".
La actuación de los vigilantes, que había sido puesta en duda por la familia Reyzabal, propietaria del inmueble, "no aparece que no se atuviera a los parámetros normales de exigibilidad a tenor de la situación que se produjo", añade el auto.
Por otra parte, el juez reconoce que en el polémico video que se grabó durante el incendio "aparecen focos de luz y sombras con figura humana en el edificio Windsor en una hora posterior a la que se dio la orden de evacuación general del mismo".
Respecto al butrón que apareció en la pared de una de las oficinas situadas en la zona de garaje que comunica con el interior del edificio Windsor a través de los sótanos, el auto considera inverosímil que fuera empleado para acceder al inmueble.
"Es un agujero de pequeño tamaño por el que difícilmente pasa una persona delgada, realizado en una pared de pladur, posiblemente desde el interior al exterior, sin que el fragmento fracturado recogido para su ulterior análisis lofoscópico haya dado resultado positivo", sostiene el auto.
Además, apunta que la rotura del candado de una puerta por la que se accedía, a través del garaje, a la zona de vestíbulo del edificio Windsor fue realizada por los bomberos para abrir vías de salida.
Cabe recordar que el pasado viernes la familia Reyzabal, propietaria del edificio Windsor, se pronunció sobre las causas que provocaron el incendio y señaló que "el edificio se incendió a consecuencia de la conjunción de dos actuaciones negligentes: la de quien originó el fuego al fumar en un despacho (una empleada de Deloitte) y la de los vigilantes encargados de la seguridad del edificio".
En un comunicado remitido a Servimedia, los propietarios del inmueble señalan que la presunción de que "el fuego se inició en el despacho 09 de la planta 21 resulta de tantos indicios que es difícil dudarlo. Sólo dos personas había en el Windsor cuando suena la alarma de incendios: una en la planta 9 y otra en la planta 21".
Los propietarios del inmueble, según las pruebas presentadas en el juicio, concluyen que la "asombrosa negligencia de los vigilantes de seguridad hizo el resto", puesto que "ni hicieron absolutamente nada por apagar el fuego en sus primeros estadios, ni llamaron de inmediato a los bomberos, perdiendo un tiempo precioso que condenó al Windsor".
(SERVIMEDIA)
31 Ene 2006
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