EL JUEZ PROCESA AL PRESUNTO EXTORSIONADOR DE CUATRO COCINEROS VASCOS
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha dictado un auto por el que procesa por un presunto delito de pertenencia a organización terrorista y otro de encubrimiento al terrorista José Luis Beotegui, quien supuestamente extorsionó a cuatro cocineros vascos.
José Luis Beotegui aseguró en su día al juez, tras su detención, el 7 de octubre de 2004, que dos restauradores, Juan Mari Arzak y Pedro Subijana, le entregaron 72.000 euros, correspondientes al pago de la extorsión exigida por ETA, a razón de 36.000 euros cada uno.
En su declaración en la Audiencia Nacional, Beotegi aseguró que la banda criminal también había exigido dinero a Arguiñano y Berasategi, aunque no le constaba que estos dos hubiesen hecho finalmente el pago a la organización terrorista.
Por esta razón, Arzak y Subijana declararon en su día ante el juez como imputados, mientras que Arguiñano y Berasategui lo hicieron como testigos.
Sin embargo, en el auto de procesamiento, el juez Andreu no hace mención a este capítulo, hasta el punto que ni siquiera nombra a los cuatro restauradores.
Fuentes jurídicas señalaron que aún no se ha dado el momento procesal para pronunciarse sobre los restauradores y que será en el auto de conclusión de sumario cuando decida si sobresee el caso respecto a ellos.
PROCESAMIENTO
En el auto de procesamiento conocido hoy, el juez explica que el 3 de octubre de 2004, la policía francesa realizó una operación antiterrorista que llevó a la detención de los presuntos miembros de ETA Mikel Albiu Iriarte, alias "Mikel Antza", y María Soledad Iparraguirre Guenecha, conocida como "Amboto".
En el curso de esta operación se detuvo en Quintanapalla (Burgos) a Pedro María Alcantarilla Mozota, propietario de una vivienda en la localidad francesa de Urrugne, donde se encontrata "uno de los zulos más importantes que ha podido tener ETA".
Tras efectuarse esta detención, la Guardia Civil procedió a investigar el entorno de esta persona, lo que les puso sobre la pista de José Luis Beotegui Ibáñez de Opacua, quien pertenecía a ETA desde 1983.
Ese año, recuerda el juez, Beotegui fue detenido y quedó en libertad dos años después. En 1985, al saber que podía ser condenado a 6 años, huyó a Francia, donde permaneció oculto en un piso que le facilitó ETA hasta 1987, cuando fue detenido por Francia y deportado a Argelia.
En 1989, fue expulsado de Argelia y trasladado a Cabo Verde, donde permanece hata 1996, año en que ETA le ordena que regrese a Francia.
Allí, según el juez, recogió y ocultó en agosto de 2000 los terroristas huidos del "comando Ustargi", Unai López de Ocariz López, Roberto Lebrero Panizo y Aitor García Aliaga.
En septiembre de ese mismo año, Pedro María Alcantarilla Mozota le pide, y así lo hizo, según el juez, que le oculte y decobijo tras la detención de Ignacio Gracia Arregui, alias "Iñaki de Rentería".
COBIJO A ETARRAS Según consta en el auto de procesamiento, el año siguiente, 2001, cobijó a tres etarras huidos: Daniel Gutiérrez Pérez, José Manuel Ugartemendía Isasa, alias "Manu", y Juan Miguel Illarramendi Zabaleta.
Además, sostiene el juez, proporcionó a ETA pasaportes y el nombre de personas que, en su opinión, podían ser captadas para integrarlos en la banda terrorista.
José Luis Beotegui Ibáñez de Opacua fue detenido por la Guardia Civil el 7 de octubre de 2004 en la localidad vizcaína de Ugao-Miravalles.
(SERVIMEDIA)
16 Nov 2005
VBR