Pedraz tomó esta decisión ante la gravedad de los delitos que se les imputan y debido al "peligro serio de fuga" que existe en ambos casos.

En el auto de prisión dictado hoy, el juez señala que "concurren bastantes motivos para suponer que los imputados participaron en el atentado cometido en la terminal T-4 del aeropuerto de Barajas" el 30 de diciembre de 2006, en el que murieron los ciudadanos ecuatorianos Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate.

Por otro lado, indica que los detenidos formaban parte del "comando Elurra" de ETA y asegura que fue Sarasola quien aparcó la furgoneta en la T-4 de Barajas.

Pedraz también afirma que Portu fue el autor de las llamadas realizadas a DYA, al diario "Gara" y al Parque de Bomberos de Madrid alertando de la colocación de la bomba en el aeropuerto de Barajas.

El juez se ha basado en las declaraciones efectuadas por Sarasola ante la Guardia Civil, en las que el presunto etarra dio "una explicación amplia y detallada de lo sucedido" y en las que "implicaba claramente" a Portu.

"Tales hechos no han sido negados en la declaración judicial (de Sarasola), pues simplemente se limitó a acogerse a su derecho a guardar silencio sin hacer alegación alguna", relata Pedraz en el auto de prisión.

Además, para decidir el ingreso en prisión de los detenidos, el magistrado ha tenido en cuenta el trozo de papel incuatado a Portu tras su detención, en el que estaba escrito el teléfono del Parque de Bomberos de Madrid.

Sarasola y Portu, que comparecieron esta mañana ante el juez Pedraz durante cerca de 20 minutos cada uno, se negaron a declarar y rechazaron practicar las pruebas propuestas por el fiscal.

Ninguno de los dos detenidos denunció durante su comparecencia ante Pedraz haber sido víctima de maltrato por parte de la Guardia Civil.

Portu y Sarasola fueron detenidos por la Guardia Civil el pasado 6 de enero en Mondragón (Guipúzcoa). Las investigaciones de la Guardia Civil han revelado que ambos terroristas formaban parte de un comando especial, "Elurra", de ETA, junto con los huidos Joseba Iturbide y Mikel San Sebastián.