El consejero de Obras Públicas del Gobierno balear, Bartomeu Reus, comparecerá próximamente en la cámara autonómica para explicr la situación de esta empresa a la que se adjudicó las obras de reforma de la carretera Deiá-Sóller (Mallorca), uno de los proyectos públicos más importantes de los últimos años.

Ignacio Sánchiz es, al mismo tiempo, objeto de una investigación por parte de las Cortes de Castilla y León a propuesta de la Junta, por una subvención de 600 millones de pesetas, cuyo destino no ha sido esclarecido todavía. El dinero se le concedió para que reflotara la empresa salmantina Hispano Textil, en la comarca de Béar, de la que era consejero delegado.

No obstante, pese a la ayuda de la Junta de Castilla y León, la empresa textil cerró sus puertas, sin que hasta ahora se sepa el destino de la citada subvención. Sánchiz ha explicado en varias ocasiones que aquel dinero se empleó en pagar a los acreedores.

Tras su periplo en Salamanca, Sánchiz reapareció hace tres años en Mallorca, donde fundó Bayop SA, a partir de la extinta Mallorquina de Contratas. Si bien el Ejecutivo balear le adjudicó el proyecto de refrma de la carretera que une las localidades de Deiá y Sóller, en un concurso denunciado por la oposición, que lo calificó de "extraño", la empresa no pudo superar la grave situación económica, acosada por las deudas.

Pese a que la suspensión de pagos es provisional, según Ignacio Sánchiz, quien anunció hace unos días una próxima ampliación de capital en la empresa, el consejero de Obras Públicas ya ha intervenido dando un plazo máximo de dos semanas para que se reanuden las obras de reforma anteriormete citadas.