Esta organización de jueces aprovecha esta efemérides para sostener de nuevo su convicción de que como proclama el artículo 14 de la Constitución "todos somos iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social".

JpD considera que "creemos incluso que es necesaria esta diversidad de razas, que garantice el convencimiento cívico de que la pluralidad es un valor a potenciar, evitando la uniformidad de cualquier índole, incluida la racial".

A su juicio, "las actitudes xenófobas, que han sido alentadas por algunos sectores sociales, deben ser desterradas radicalmente, garantizando que el sistema educativo favorezca su erradicación".

Esta entidad subraya que "las instituciones y los responsables públicos tienen además una responsabilidad sustancial para asegurar que no se identifique extranjeros y delincuencia, apostando por políticas que no sólo busquen la integración social, sino es el respeto de la mayoría a culturas y razas minoritarias y diferentes".

Finalmente, Jueces para la Democracia recuerda su compromiso con estos valores, condenando cualquier forma de xenofobia o racismo, y reitera su petición de responsabilidad "a aquellos responsables públicos que, sin otro fundamento que el odio, siguen pretendiendo identificar al colectivo de extranjeros con males que no tienen otro origen que la desigualdad social y económica".