JUARISTI DICE QUE E ANTIESPAÑOLISMO DE LOS NACIONALISTAS VASCOS ES CONNATURAL CON LA IDENTIDAD ABERTZALE
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El director de la Biblioteca Nacional, Jon Juaristi, afirmó hoy que el antiespañolismo que caracteriza históricamente al nacionalismo vasco es connatural con la propia identidad abertzale y, al tiempo, le distingue del resto de movimietos nacionalistas españoles.
Juaristi hizo estas consideraciones durante la conferencia "Los nacionalismos vascos al filo del milenio", que impartió esta noche en el Club Siglo XXI, en Madrid.
Explicó el intelectual vasco que, ante la inminencia de las elecciones autonómicas vascas, el nacionalismo vasco recurre a la "escenificación imaginaria de una guerra civil y pronostica -en el caso del triunfo de los partidos constitucionalistas y la eventual formación de un gobierno de coalición entre el P y el PSE- la implantación de una dictadura que gobernaría con la ley marcial y relegaría medio millón de abertzales a la condición de ilegales en su propio país".
En su opinión, estas reflexiones que hace para si el nacionalismo vasco y que transmite por medio de su discurso político, se imbrican en el mismo carácter nacionalista, resultado de una tradición mezcla de mitología y victimismo, entre otras consideraciones.
Agregó Juaristi que, "por un mecanismo psicológico de proyección, el discursovictimista del nacionalismo describe el mismo futuro que los dirigentes abertzales han estado prometiendo a los vascos no nacionalistas durante los últimos años y al que los dos años y medio de gobierno del frente de Estella han servido de ensayo general. El Milenio, en su doble sentido de categoría cronológica y escatológica (en alusión al fin de los tiempos), asume en la imaginación nacionalista los rasgos de un apocalipsis", asegura.
En clave electoral, el responsable de la Biblioteca Nacional explcó las razones por las que se ha producido esta "reacción angustiosa" del nacionalismo ante la posibilidad de una alternancia en el gobierno autónomo, como la que podría producirse la próxima primavera.
"En primer lugar", comentó sobre este particular, "debe considerarse que el fundamento irrenunciable de todas las variantes del abertzalismo no es otro que el mito aranista de la pérdida de la primitiva independencia de los vascos a manos de España, con el resultado de una degeneración biológica y espiitual de la raza a causa del mestizaje impuesto por el invasor".
En este punto, Juaristi subraya que, a diferencia de los nacionalismos catalán y gallego, el antiespañolismo es en el caso vasco "un dogma constitutivo de la identidad abertzale", lo que, a su juicio, hace imposible la integración del nacionalismo vasco "realmente existente" en un sistema político español, "por muy democrático que éste sea y por muchas concesiones que haga a los nacionalistas dentro del marco de la autonomía".
"Por tra parte, debe tenerse en cuenta", añadió, "el triple fracaso histórico del nacionalismo vasco: el proyecto radical ha fracasado porque jamás ETA ha conseguido traspasar los límites de un grupo terrorista y devenir un ejército de liberación nacional; el proyecto moderado, porque hoy está más lejos que nunca de hacerse realidad su ideal de un gran partido-comunidad sostenido por un terrorismo optimizado y, por último, el proyecto frentista, porque la sociedad española ha resistido -aseguró- la brutal presin de ETA y las incitaciones del PNV a negociar una paz vergonzosa".
En tal sentido, concluyó diciendo, las elecciones autonómicas de mayo de 2001 "abren para los vascos un nuevo panorama histórico lleno de esperanza".
(SERVIMEDIA)
08 Mar 2001
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