En un comunicado, JpD expresa su disconformidad con lo que califica de "política de exclusión sistemática por motivos ideológicos" de los candidatos progresista a integrarse en la Sala de lo Penal del Supremo.

Esa política, añade JpD, ha sido decidida por la mayoría conservadora del Consejo General del Poder Judiial "y seguida fielmente respecto a cualquier magistrado que no sea afín a dicha mayoría, cualesquiera que sean sus méritos".

Esta asociación de jueces puntualiza, no obstante, que no ha emitido ninguna crítica al nombramiento de Francisco Monterde como nuevo magistrado de la Sala Segunda del Supremo y asegura que le felicita por su designación.Monterde fue elegido en detrimento del candidato propuesto por la minoría progresista del CGPJ, Alberto Jorge Barreiro.