Así se desprende del estudio "Jóvenes españoles 2005", que presentó hoy en Madrid la Fundación Santa María, que lo ha elaborado tras las entrevistas realizadas a 4.000 jóvenes de toda España de entre 15 y 24 años.

El sociólogo Javier Elzo, autor del capítulo de este estudio dedicado a "Valores e identidades de los jóvenes", subrayó que, por contra, los jóvenes se ven en menor porcentaje como solidarios, trabajadores, genererosos y maduros.

Elzo también comentó que los problemas sociales más importantes para la juventud son en primer lugar el terrorismo, seguido de la droga, el paro, la vivienda y la violencia doméstica.

Añadió que los jóvenes son cada vez más permisivos en la justificación de los comportamientos de carácter privado, como el divorcio, el aborto, la adopción por parte de parejas homosexuales, y más exigentes en comportamientos públicos como el terrorismo, el pago de impuestos, la violencia doméstica y la pena de muerte.

A preguntas de los periodistas, Elzo señaló que la imagen de los jóvenes españoles "no es demasiado halagüeña. Hay jóvenes que quieren vivir la vida y punto". Según dijo, esto se debe a que "a la imagen social negativa de la juventud y a que se sienten atados a sus padres ante la imposibilidad de emanciparse por la carestía de la vivienda".

En este sentido, el sociólogo destacó que lograr la emancipación de los jóvenes debe ser una cuestión de Estado, y agregó que los padres, más que comprar motos y coches a sus hijos, deberían ayudarles a pagar la vivienda los dos o tres primeros años.

CONFIANZA

Por su parte, Juan María González, autor del capítulo "Relaciones e Integración", indicó que los jóvenes depositan mayor confianza en las organizaciones dedicadas a temas de voluntariado (69%), seguidas del sistema de enseñanza (60%), el sistema de Seguridad Social (54%), la Policía (51%), la UE (50%), las Fuerzas Armadas (37%), la OTAN (36%), las multinacionales (24%) y la Iglesia (21%).

Respecto a movimientos sociales, aumenta considerablemente el apoyo entre los jóvenes a los grupos ecologistas y los de defensa de los derechos humanos, los movimientos pacifistas, y los de los gays y lesbianas, en detrimento de los movimientos Provida, los feministas, nacionalistas, y de apoyo y acogida de inmigrantes.

En cuanto al fenómeno de la inmigración, un 67% de los encuestados está de acuerdo con la entrada de inmigrnates siempre y cuando tengan un contrato de trabajo, frente a un 15,7% que optan por facilitar al máximo su entrada y un 10% que opina que hay que prohibirla.

Por su parte, Pedro González, director del informe y autor del capítulo "Familia y jóvenes", comentó que se constata en los jóvenes un pluralismo en la apreciaciones de lo que constituye una familia. Además, señaló que la juventud valora el matrimonio, pero lo retrasa y también valora el tener hijo.

En cuanto al apartado de "Jóvenes y religiosidad" de este estudio, su autor, Juan González, subrayó que, por primera vez en España, los jóvenes que se consideran católicos no llegan al 50%.

El informe señala que sólo un 10% de los jóvenes se declara católico comprometido frente a un 20% que se caracteriza por la indiferencia religiosa, agnosticismo o ateismo. El resto, descontando una minoría religiosa no católica, se constituye por una gran masa de spañoles que en mayor o menor medida están identificados con su condición de católicos, pero que se caracteriza principalmente por su pasividad.

Explicó que estos datos se justifican en la secularización de la sociedad, los cambios políticos en una dirección laicista y a la desconfianza que suscita en los jóvenes las opiniones de la jerarquía católica en cuestiones de sexualidad como el aborto y el matrimonio homosexual.

POLÍTICA

Maite Valls, autora del capítulo "Jóvenes y política", recalcó que el 46% de los encuestados no se decantaría por un partido concreto si hoy hubiera elecciones generales. Este desinterés viene avalado por el décimo puesto que dan a la política en la escala de aspectos importantes de la vida, sólo por delante de la religión.

En cambio, la familia, la salud, los amigos y conocidos, el tiempo libre y el ocio, entre otors, se sitúan entre los primeros puestos.

En cuanto a su orientación política, la mayoría se ubica en el centro (28%), seguido por el centro-izquierda (26%) y la extrema izquierda (casi el 13%).

Finalmente, José Antonio López, autor del apartado dedicado a la Juventud y el ocio, aseguró que para un 92% de los jóvenes, el ocio y el tiempo libre es un elemento en su organización, funcionamiento y nivel de vida.

Entre sus gustos y aficiones destaca escuchar música (98%), ver la televisión e ir al cine (94%), salir a bares, cafeterías o pubs (93%) y escuchar la radio (programas de música y deportes) (90%).

López comentó que respecto a estudios anteriores, los jóvenes actualmente salen menos de copas, pero llegan más tarde a casa, y su modo de relacionarse se ha transformado debido principalmente a las tecnologías de la información y la comunicación.