Tras acusar a Hernando de haber increpado a Rubalcaba e incluso de intentar agredirle, Blanco dijo en la Ser que "el Partido Popular quería conseguir un titular ayer con una bronca en el Parlamento".

A su juicio, la actitud del portavoz del PP en la Diputación Permanente, José Ignacio Echániz, supuso una total falta de respeto al presidente del Congreso y a los grupos parlamentarios y una demostración de que los populares no aceptan las reglas de juego.

Igualmente, se refirió a la posterior intervención "crispada" del portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, "pegando puñetazos en la mesa, no respetando tampoco al presidente, sobreactuando".

A su juicio, lo que hizo Zaplana fue "alimentar una tensión que el Partido Popular quería provocar". "El PP cree que con una oposición crispada le va bien, y eso lo estamos viendo todos los días". Sin embargo, en opinión de Blanco, el PP se está alejando cada vez más de la sociedad con esta estrategia.

Respecto al incidente entre Hernando y Rucalbaca, dijo que se trató de una nueva sobreactuación del diputado popular. "No quiero recordar el pasado, pero todos sabemos cómo sobreactúa el diputado Hernando (...) Esas no son formas de actuar en el Parlamento".