Después de tomar posesión de su nuevo cargo, Sánchez expresó su agradecimiento al Gobierno por el nombramiento y subrayó que "vengo a dirigir el mejor grupo de radiotelevisión de España y, creo no equivocarme, uno de los mejores de todos los que existen".

Tras asegurar que el diálogo, la libertad de expresión y el pluralismo poltico son valores muy asentados en RTVE desde hace tiempo, el nuevo director del ente público se comprometió a mantener una actitud de "mano tendida y de puertas abiertas" respecto a los representantes de los trabajadores del grupo.

Sobre su antecesor en el cargo, Javier González Ferrari, Sánchez recalcó que éste ha dejado RTVE en el lugar más alto que jamás ha ocupado y le trasladó su agradecimiento.

Por su parte, González Ferrari dijo que los dos años durante los cuales ha estado al frente del ete público han sido muy intensos y a lo largo de los mismos se han tenido que adoptar decisiones que afectaban a la estructura de RTVE, que buscaban una solución para el grupo y que no podían demorarse porque el endeudamiento y el déficit hacían peligrar la viabilidad de la radiotelevisión pública.

"Para un periodista con casi treinta años de ejercicio profesional", indicó Ferrari, "constituye un reto formar parte del que sin duda es el primer grupo de comunicación de este país. Haber tenido la oportuidad de dirigirlo ha sido para mí un privilegio que va a marcar un antes y un después en mi trayectoria".

Finalmente, el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, agradeció a Ferrari "la dedicación, el esfuerzo y la intensidad con la que ha trabajado a lo largo del tiempo que ha ocupado la dirección del ente público" y añadió que ha conseguido que TVE sea vista por los ciudadanos como una televisión de calidad y con credibilidad.

Respecto a José Antonio Sánchez, Rajoy señaló que su retoahora es continuar esta labor y lo definió como un periodista con una muy larga trayectoria que conoce los medios de comunicación y como un hombre sensato y equilibrado que va a hacer las cosas bien.

El "número dos" del Ejecutivo le deseó "mucha suerte, buena mano" y "el mayor equilibrio posible a la hora de tomar sus decisiones", teniendo presente siempre los intereses generales. "Le recomiendo que dialogue, pero también hay que entender que el diálogo en ningún caso puede suponer abdicación de las rsponsabilidades", dijo.