Joaquín Prat fue incinerado en el crematorio de a Almudena, en donde la llegada del féretro, acompañado de dos vehículos cargados de coronas de flores, fue acogida con aplausos por las personas allí concentradas para rendir un último homenaje al fallecido.

A lo largo de la mañana, numerosos trabajadores del mundo de los medios de comunicación y del espectáculo acudieron al velatorio a dar su último adiós a Joaquín Prat, y destacaron su talla humana y profesional.

Matías Prats expresó el orgullo que siente cada vez que alguien confunde su nombr y le llama "don Joaquín" y aseguró que, pese a tener edad para ser su padre, aprendió de él cosas que le ayudaron a mejorar su oficio.

El novelista Fernando Vizcaino Casas recordó que conoció a Joaquín Prats hace 56 años y que compartieron estudios en la carrera de Derecho en la Facultad de Valencia.

Jordi García Candau, director general de RTVE, señaló que, con la muerte del presentador, el ente público pierde uno de sus principales activos, mientras que el payaso Emilio Aragón lo calificó de "uera de serie".

Carmen Pérez de Lama, con quien hizo pareja radiofónica durante años, aseguró que, incluso después de su muerte, es imposible no esbozar una sonrisa al pensar en Joaquín Prat porque era una persona que "daba alegría" a todos.