En declaraciones a Servimedia, Garralda se refirió a "la sensibilidad actual del sistema" para justificar que en una primera fase no se identifique a las entidades perceptoras de ayudas.

"Dada la volatilidad actual, cualquier institución que diga que ha accedido a esas ayudas perderá cotización en Bolsa y se expone a una estampida de depositantes", prosiguió Garralda, "lo que producirá retrasos en la toma de decisiones y efectos aún más negativos".

Por ello, Garralda se mostró comprensivo con las cautelas adoptadas por el Gobierno, si bien subrayó que "pasada una temporada deberá saberse quiénes recibieron ayudas" y qué hicieron con ellas.

"Esto no es ir en contra de la transparencia", puntualizó, "sino tener en cuenta las circunstancias tan excepcionales que ahora se dan".

Según el profesor, "cuando el Banco de España perciba que la volatilidad no es muy elevada", seráel momento de informar sobre el fondo de apoyo al sistema financiero "y fiscalizar su gestión y opinar al respecto".

Pasado ese tiempo, habría que aplicar unapolítica de transparencia informativa", recalcó, "que será la que resulte ganadora tras toda esta crisis", concluyó Garralda.