EL JEFE DE INSPECCION DE GASOLINERAS NO ORDENO LA ROTACION PORQUE "SUFICIENTE TENIA YOCON HACER DE BOMBERO CON 1,5 INSPECTORES"

MADRID
SERVIMEDIA

Enrique Sacristán, jefe del Servicio de Inspección de Gasolinas de la CAM en el momento en que salió a la luz el informe de la OCU sobre presuntos fraudes en este sector y cesado pocos días después, explicó que todas los estaciones de servicio eran inspeccionados al menos una vez al año y destacó que no ordenó la rotación de los inspectores a su cargo, porque "suficiente tenía yo con hacer de bombero con un inspector y medio qu tenía".

Tras dejar claro que nunca aceleró la tramitación de ningún expediente, a petición de un inspector, dijo que ocupaba ese cargo desde 1994 y que, en esa etapa, han existido cientos de irregularidades en gasolineras, pero no fueron perseguidas al no superar el fraude el 1%.

Con respecto al informe de la OCU, afirmó que lo conoció por los periodicos y dijo que en ese momento se programaron una serie de inspecciones aleatoriamente en algunas de las estaciones señaladas como defraudadoras.

Sacristán destacó que no encontraron indicios de errores significativos ni destriparon los aparatos, ateniéndose a la legislacion vigente.

Después de precisar que la existencia de precintos rotos no supone la existencia de fraude, porque puede ser debido a negligencias de los reparadores de los surtidores, señaló que durante el tiempo que estuvo al frente del servicio de inspección no recibió denuncias de usuarios sobre cantidades de combustible.

Reconoció la posibilidad de fraudes electricos, ue calificó de "burdos", e informáticos, "mas sofisticados", pero dijo desconocer que se puediera manipular los expendedores con un mando a distancia, ya que no es un experto informático.

Con anterioridad a la comparecencia de Sacristán ante la comisión que investiga en la Asambla de Madrid el supuesto fraude de las gasolineras, Adriano Coronel, jefe de los inspectores de la antigua red de Campsa, explicó a sus señorías que "si esto que se ha producido ahora y no se producía antes es porque había una ontinuidad en las inspecciones, que parece ser que ahora no deben de existir".

Añadió que hacer inspecciones "de manera continua y constante, sin previo aviso y por sorpresa, es el unico sistema para poder detectar a los que defraudan, que no son todos".

Por último, afirmó que "en mi época, se hacian del orden de 600 a 700 inspecciones mensuales, y había un mínimo de fallo, porque la gente cumplía con su obligacion por temor a las inspecciones".

(SERVIMEDIA)
17 Mar 1998
SMO