Los ingresos podrían rozar al final de este plan los 600 millones de euros, es decir duplicar los ingresos logrados el pasado año por la compañía.

De este modo, los ingresos de los hogares representarán el 66% del total, mientras que las empresas aportarán el 9% de la facturación en el año 2010.

Junto a ello, el Ebitda se afianzará y pasará de un dato negativo a unos beneficios antes de impuestos de entre 70 y 85 millones de euros.

Al tiempo que avanzará el beneficio, los gastos de estructura descenderán en estos tres años cerca de un 36%, debido a la mejora de la eficiencia operativa.

En cuanto al número de clientes, la compañía estima que ya durante el primer trimestre del año 2008 se han logrado cerca de 22.500 nuevos usuarios, cifra que se situaría entre los 95.000 y los 115.000 al finalizar el presente año.

Con todo ello, la operadora elevará cerca de dos puntos y medio su cuota de mercado en acceso a Internet a través de banda ancha, que se colocará en el 5,5%, frente al 50,5% de Telefónica.