ETA

JAIME LARRÍNAGA CRITICA AL OBISPO URIARTE POR MOSTRAR SU "CERCANÍA" HACIA LOS FAMILIARES DE PRESOS ETARRAS

MADRID
SERVIMEDIA

El jesuita Jaime Larrínaga, que debió abandonar su parroquia de Maruri (Vizcaya) por la presión de ETA, reprochó hoy al obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, que haya expresado su "cercanía" y "sensibilidad" hacia los familiares de los presos etarras.

Larrínaga dijo a Servimedia que le "duelen" estas palabras de Uriarte, al tiempo que añadió que estas reflexiones "van a doler mucho a muchas familias que son víctimas de ETA".

El ex párroco de Maruri valoraba así que Uriarte señalara este lunes, durante un encuentro informativo en Bilbao, que "un obispo de San Sebastián no puede menos que mostrar su cercanía humana y consuelo espiritual a los familiares de los 600 presos dispersos en más de 50 cárceles españolas que padecen riesgos y quebrantos para visitarlos".

A este respecto, Larrínaga afirmó que los que más sufren son las víctimas del terrorismo, quienes en el País Vasco "son ciudadanos de segunda clase que no tienen derechos".

Al mismo tiempo, este jesuita se preguntó si el obispo donostiarra está "nervioso" ante el próximo cambio de Gobierno en el País Vasco. Añadió que no estaría "mal" fijarse en los familiares de presos etarras si no existiera el colectivo de las víctimas, que son "pisoteadas" y "olvidadas".

(SERVIMEDIA)
30 Mar 2009
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