En su manifiesto con motivo del Día del Orgullo Gay, la coalición que lidera Gaspar Llamazares subraya que "en el camino hacia la igualdad, hemos recorrido en este 2005 un avance histórico: la reforma del código civil español por la que se amplía el derecho al matrimonio y adopción a parejas del mismo sexo".

"Izquierda Unida, primera fuerza política que asumió como propias e incuestionables las reivindicaciones LGTB, primera fuerza que defendió la medida que ahora celebramos, no puede dejar de manifestar su orgullo por vivir en una democracia cada vez más integradora y sensible a aquello que la enriquece: la diversidad", añade.

No obstante, reconoce que "queda mucho por hacer, la lucha contra la homofobia por la educación sexual, una Ley de Identidad de Género, y una Ley estatal de Parejas de Hecho son todavía metas para seguir ilusionando a millones de personas para transformar la sociedad".

"No debemos atender a quienes, frente a la apuesta transformadora que trae consigo el reconocimiento de la libertad sexual, apelan a fantasmas del pasado y adoptan actitudes reaccionarias. En Izquierda Unida lo tenemos claro: la sociedad democrática no es ni puede ser cómplice, rehén, ni esclava de una moral doctrinaria, excluyente y regresiva", insiste.

Concluye que "quienes ahora quieren hacer invisible la libertad y la pluralidad de la convivencia son quienes desde siempre han venido oponiéndose a toda conquista social. Por eso animamos a la sociedad civil a que el próximo día 2 de julio apueste por estos valores de la diversidad, de la pluralidad, de los derechos civiles y de los derechos humanos para conseguir otro mundo posible".