Llamazares abogó en una rueda de prensa por presentar una alternativa contundente desde la oposición a lo que consideró "una ctitud impositiva" del Gobierno, al que acusó además de "intentar leer de forma regresiva la Constitución y de buscar un permanente conflicto con las comunidades autónomas", generando así una grave crisis institucional.

Desde su punto de vista, el conflicto entre el Gobierno central y el vasco no es puntual, sino que se encuadra en una relación conflictiva con el conjunto de las comunidades autónomas. "Quien dice que la Constitución es la garantía de la armonía es justo quien la utiliza como arma arroadiza para generar descohesión, conflicto y división", sentenció.

Ante la "ofensiva conservadora, autoritaria, centralista del PP", es necesario plantear una salida. En su opinión, la más adecuada sería la moción de censura pero, puesto que el partido mayoritario de la oposición, el PSOE, se ha negado, hay que optar por otra alternativa.

Esa alternativa puede ser, explicó, "hacer algo" cuando las polémicas enmiendas introducidas a los presupuestos en el Senado vuelvan al Congreso. En esa sesión, ugirió, se podría ampliar el debate y denunciar "el escaso talante democrático" del Gobierno.

Llamazares aseguró que ya ha tenido conversaciones con el Grupo Socialista y con el PNV, y ambos le han expresado su disposición a convertir la sesión de la próxima semana en un debate sobre la falta de diálogo del Ejecutivo presidido por Aznar.