El portavoz de IU, Felipe Alcaraz, reconoció que esta iniciativa parlamentaria es más "testimonial" que efectiva, puesto que con las Cámars disueltas esa comparecencia sólo se prodría producir a petición propia del Gobierno y ante la Diputación Permanente.

La costumbre parlamentaria ha establecido que la semana siguiente a las cumbres europeas el presidente del Gobierno informe al Congreso, un hábito que se vería roto ahora, justo en un momento en que está en discusión el futuro modelo social europeo.

Alcaraz destacó que en esta cumbre se está debatiendo "un cambio radical" del sistema social que afectará al mercado de trabajo y suondrá el abaratamiento del despido y la reducción de las prestaciones por desempleo, temas en los que el Parlamento "no puede quedar fuera".

Con esta iniciativa, el PNV e IU pretenden forzar al Gobierno a que informe a la Diputación Permanente o a que se comprometa a comparecer ante la nueva Cámara en cuanto quede constituida para explicar las conclusiones de la cumbre de Lisboa.