En la iniciativa, a la que tuvo acceso Servimedia, la coalición recuerda que la apostasía, renuncia voluntaria y expresa de la religión que se profesa, es un derecho reconocido en la legislación española e internacional.

Sin embargo, considera que el proceso es "muy lento e incierto en su resolución", ya que las confesiones no suelen reconocerlo en la práctica.

Incluso, denuncia la coalición, las confesiones se aprovechan de esa circunstancia, ya que les permite "aumentar artificiosamente su número de fieles" con el fin de obtener mayores privilegios sociales y económicos, "sin preocuparles demasiado la integridad de las creencias de dichos fieles ni si sus prácticas se corresponden realmente con su supuesta condición".

Pide por ello al Gobierno que estudie las reformas legales oportunas "para establecer un procedimiento que permita de forma rápida y con garantías causar baja de las religiones a todos los efectos legales y económicos posibles, la inscripción expresa de sus asientos de baja y la supresión de los datos personales que obren en sus registros".