Según un comunicado de IU, la situación creada después de la citada resolución judicial itúa el sistema educativo en una posición claramente regresiva, ya que, a su juicio, supone la consolidación de las enseñanzas religiosas dentro del 'curriculum' escolar.

"Izquierda Unida se opone a la inclusión de la religión entre las materias optativas de los centros escolares públicos, por considerar parte esencial de un modelo de escuela progresista su total independecia de doctrinas religiosas, políticas o de cualquier tipo", añade la nota.

A juicio de IU, no es válido el argumento de que l mayoría de la población es católica y subraya su postura favorable al concepto de la escuela laica, "en la que se puedan cumplir los cometidos educativos que la sociedad demanada, dejando para otras entidades la asunción de las competencias que le correspondan".

Asimismo, pide la "inmediata" revisión del concordato Estado español-Vaticano, por considerar que conlleva aspectos regresivos, "que son consecuencia de la actual política del Gobierno hacia la Iglesia católica".

Por su parte, la Federacón de Enseñanza de CCOO también criticó la sentencia, por considerar que "viola las conciencias de los cuidadanos españoles, obligándoles a declarar sus creencias, vulnerando de esta forma los artículos 10 y 16 de la Constitución"

"La Federación de Enseñanza de CCOO espera que el recurso que plantee el Ministerio de Educación y Ciencia y la posterior sentencia del Tribunal Constitucional garanticen la libertad de todos los alumnos y alumnas, no privilegiando a ciertos sectores por pertenecer a una detrminada confesión religiosa", añade en un comunicado.