En declaraciones a Servimedia, Fernández se mostró particularmente en contra de los encierros, porque en poblaciones tan populosas como las madrileñas "es prácticamente imposible garantizar la seguridad". A su juicio, no hay ninguna medida que permita garantizar que no corran menores y gente bebida, "por mucha intención que se ponga", porque son encierros absolutamente masivos.

Para Fernández, las medidas apuntadas por el Ejecutivo regional de aumentar de los 16 a los 18 años la edad mínima de los corredores y de obligar a una inscripción previa, "me parece que tienen un punto de cinismo", porque quienes tienen que aplicarlas son los ayuntamientos y en la práctica, es decir, durante los encierros, es prácticamente imposible controlarlas.

Por ello, cree que hay que tomar medidas "más pragmáticas que a lo mejor no son la panacea, pero que sí son aplicables", como que los encierros no se celebren en fines de semana, cuando se producen las mayores aglomeraciones.

Pero, sobre todo, pidió a la Comunidad que, "en lugar de poner deberes de imposible cumplimiento a los ayuntamientos, se responsabilice y vea en cada encierro si hay condiciones suficientes para cumplir el reglamento taurino y, de no ser así, que lo prohiba".

"Yo creo que la comunidad, salvo en casos muy evidentes de que falta algo de manera flagrante, habitualmente autoriza todos los encierros, y después es cuando evalúa si ha habido algún tipo de incumplimiento", indicó Fernández. Agregó que, cuando hay algún problema, el Gobierno regional "se lava las manos diciendo que ha fallado tal o cual cosa".

En definitiva, el diputado de IU cree el Gobierno regional, "en vez de poner las condiciones y luego laverse las manos, debe pringarse en la ejecución de las mismas" y tomar la responsabilidad de suspender un encierro en algún momento dado, y no dejar la responsabilidad sólo a los alcaldes.