En declaraciones en la sede de IU, durante la celebración del Consejo Político Federal de la coalición, Alcázar recalcó, aunque el Gobierno haya dado argumentos y los sindicatos han informado favorablemente, "la UE no se puede construir con ambajes y contradictorias tan gordas".

En su opinión, los "grandes problemas" a los que debería hacer frente son las dificultades propias de nuestro mercado laboral, la estructura productiva y una economía que "crece pero que tiene un 25 por ciento de economía sumergida".

Aconsejó al ministro que se preocupe por que los inmigrantes, "también búlgaros y rumanos, que trabajan en condiciones irregulares lo hagan en condiciones de igualdad y con derechos regulados".

Criticó que Caldera no haya tenido "ningún problema" en apoyar la directiva Bolkestein, que provocará una "gran dificultad al mercado de trabajo español, soportado en el sector servicios", y en cambio haya sido "tan diligente" a la hora de poner en práctica la "no incorporación" de los trabajadores de estos países.

Finalmente, el dirigente de Izquierda Unida subrayó que "los trabajadores son los primeros que deben igualar los derechos, no las grandes expectativas de negocio y la lógica de la maximización de los beneficios".