Uno los argumentos que utilizó la Audiencia Nacional se basaba en que los objetivos y finalidad de las obras no quedaban uficientemente aclarados.

Por ello, la exposición de motivos de la ley que declara las obras de interés general reconoce que la sentencia de la Audiencia Nacional aconseja incluir las finalidades y características del proyecto en los anexos de esta nueva normativa.

La ley que entra mañana en vigor señala que el objetivo del embalse de Itoiz y el Canal de Navarra es regular las aportaciones del río Irati, garantizar suministros para consumos humanos y regadíos y el aprovechamiento hidroeléctrico. Estos argumentos son rechazados por las organizaciones ecologistas y la Coordinadora de Itoiz, contrarios a ambos proyectos, para quienes no tiene sentido justificar una obra hidráulica en función de la creación de nuevos regadíos cuando el Parlamento todavía no ha aprobado el Plan Nacional de Regadíos.

Además, la Coordinadora de Itoiz mantiene que la declaración de las obras de interés general no debe influir en la sentencia del Supremo, ya que el proceso judicial se inició cuando esta ley no exitía.

A la sentencia de la Audiencia Nacional que declaró ilegales las obras se sumó hace unos días otra que anulaba parte del proyecto por carecer de la preceptiva evaluación de impacto ambiental.