Tras afirmar que, también, "estamos molestos por la carrera que se ha abierto dentro del partido para disminuir la presión fiscal", dijo que espera la participación de la militancia,en la Conferencia Programática del PSOE, en enero, para debatir entre todos estas cuestiones.

Esta corriente interna del PSOE, preocupada por el hecho de que el programa electoral del candidato, José Luis Rodríguez Zapatero, se decanta hacia posiciones centristas, considera que,"si se retiran nuestras señas de identidad", se corre el riesgo, asimismo, de "no atraer el voto del joven con posiciones de izquierda y preocupado por el cambio climático y el Estado de Bienestar".

Respecto a la política fiscal, afirmó que si se bajan más los impuestos será "más difícil romper la brecha, en materia de Estado de Bienestar, que existe entre España y la UE de los 15".

Su "enfado" por las "filtraciones" de prensa tiene que ver con la descalificación, por parte de la dirección federal del PSOE, de los defensores, dentro de los encargados de elaborar el programa electoral, de la creación de un impuesto ecológico sobre la gasolina, el llamado céntimo ecológico, para invertirlo en la lucha contra el cambio climático.

Tras recordar que, en materia de medio ambiente, estamos "a la cola" de la UE en cuanto al cumplimiento del Protocolo de Kyoto para 2010 y asegurar que "muchas ciudades españolas tienen ya graves problema de contaminación", indicó que "no aceptamos esa carrera para bajar los impuestos, teniendo en cuenta que España tiene una baja fiscalidad".

Por otro lado, explicó que "hemos echado en falta más firmeza con la Iglesia", por parte delGobierno presidido por Zapatero, "en temas de enseñanza, aborto o eutanasia, que están sin resolver al no querer abordar la negociación del Concordato".