Este es el resultado más destacado de una simulación fscal realizada por Juan Manuel Castañer y José Félix Sanz, en un estudio titulado "Imposición lineal sobre la renta y equivalencia distributiva: un ejercicio de microsimulación", a la que tuvo acceso Servimedia.

Los dos expertos consideran que un IRPF de tipo único que pretenda mantener el nivel de recaudación de la campaña de renta de 2001 y la capacidad redistributiva del sistema actual debe fijar el tipo en el 34,38%, con un mínimo vital por adulto contribuyente de 6.911,64 euros, más una cantidad or hijo y ascendiente.

Con estas características, el tipo único impositivo perjudicaría especialmente a los hogares unipersonales, mientras que se convierte en favorable para las familias de dos o más hijos y especialmente positiva para los hogares con ascendientes a cargo.

Este efecto es tan beneficioso para las familias que los autores llegan a afirmar que el tipo único "mas que un impuesto sobre la renta es un subsidio al tamaño familiar, que favorece a los hogares con mayor número de hijos y e ascendientes a cargo" y "supone una importante transferencia de renta de los hogares unipersonales y de los formados por un adulto y un hijo hacia el resto".

Este hecho es atribuible a que la cuantía del mínimo vital que se tiene en cuenta es creciente con el tamaño del hogar, mientras que desaparecen tanto la deducción por vivienda habitual como el tratamiento fiscal preferencial para los planes de pensiones.

RICOS

Sin embargo, los estudiosos llegan también a otras conclusiones sobre el IRPFde tipo único, ya que la simulación realizada sobre el Panel de Declarantes de 1995, actualizada a 2001, ofrece datos dispares.

Así, con el citado tipo único del 34%, el 1% de contribuyentes más ricos sería el más beneficiado, con un ahorro anual de 9.500 euros, mientras que el 10% de contribuyentes con menos ingresos se mantendría fiscalmente en una situación similar a la actual.

Por otra parte, según los resultados de la simulación, la reforma para aplicar el tipo único beneficiaría más a los nveles intermedios de renta, los comprendidos entre 12.000 y 22.000 euros de ganancias anuales (entre 2 y 3,6 millones de pesetas).

Por último, los expertos consideran que el tipo único penaliza a los ingresos procedentes de rentas mobiliarias, si bien favorece ligeramente a quienes tienen rentas empresariales entre los ingresos familiares.