Montoro, que intervino en un seminario sobre "La estabilidad macroeconómica: garantía de crecimiento económico y cohesión", organizado por la Fundación ICO, anunció a la prensa que llevará el anteproyecto de Ley del IRPF al Consejo de Ministros en dos semanas, para que sea elevado los órganos consultivos del Estado haci el 19 de abril.

Señaló que la reforma fiscal traerá una rebaja de la tarifa para todos los contribuyentes, que se aplicará en enero del año que viene, y aseguró que, gracias a esa reforma, el año 2003 volverá a ser un ejercicio de crecimiento económico y de creación de empleo.

Sobre los puntos que respetará o variará el Gobierno del informe Lagares dijo que están estudiando las propuestas y que "todavía es pronto para entrar en detalles". Añadió que, a lo largo de la próxima semana, en distintosactos públicos que hay convocados, "yo mismo iré desgranado la posición del Gobierno", junto con otros altos cargos del Ministerio de Economía y el Ministerio de Hacienda.

La intención del Gobierno es que la nueva reforma del IRPF empiece a discutirse en el Parlamento antes del verano. Según Montoro, están en estas semanas plenamente dedicados a esta nueva reforma que, según dijo, además de cumplir el compromiso electoral del Gobierno, beneficiará al conjunto de los contribuyentes, especialmente a losde rentas más bajas, a los grupos con más problemas de empleo y a los pensionistas.

Montoro rechazó las crítica sindical de que la reforma de 1998 benefició a las rentas más altas y aseguró que la realidad es justo la contraria. "Esa crítica no tiene sentido, es una crítica francamente ligera, hecha desde un prejuicio ideológico", dijo.

Añadió que los sindicatos deberían recibir positivamente una reforma que mejora la contratación y las condiciones objetivas para el acceso al trabajo de las persoas con mayores problemas para conseguir empleo, como los mayores de 52 años y las mujeres con hijos pequeños a cargo.

En cuanto al coste de la reforma para Hacienda, dijo que es "el que hoy nos permite asumir un presupuesto equilibrado". Agregó que será un coste "razonable", y compatible con el déficit cero, que dejará abierta la puerta para seguir bajando los impuestos en el futuro. Explicó que el año que viene la presión fiscal bajará en España dos décimas.

Durante su intervención en el seminaro organizado por la Fundación ICO, Montoro dedicó parte de su discurso a criticar a la oposición, tanto por su rechazo a la ley de estabilidad presupuestaria, como por las últimas propuestas socialistas sobre el IRPF y de reducción de jornada para los trabajadores con hijos con problemas escolares.

Calificó de "planteamiento extremista" la defensa del PSOE de un IRPF de tipo único y de "estérico" que propongan disminuir la jornada a los trabajadores con hijos con fracaso escolar. "Son fórmulas inaudits en el mundo que llevarían a situaciones como que una empresa, para la contratación de un trabajador, le exija el certificado de escolaridad de sus hijos", concluyó.