Montoro aseguró que esta medida beneficiará a 1,1 millones de contribuyentes y que se tratará de una modificación "sustantiva". Aunque, según publica hoy el diario "El País", esta iniciativa es consecuencia de una sentencia del Tribunal Supremo, él aseguró que el Gobierno la estaba preparando en los ltimos meses.

Según sus previsiones, las nuevas retenciones se dejarán notar en las nóminas correspondientes a noviembre y diciembre, porque las empresas necesitarán tiempo para aplicarlas. Asimismo, reconoció que la rebaja supondrá una merma en los ingresos del Estado, aunque temporal, puesto que el pago final del impuesto sigue siendo el mismo y entonces se realizarán menos devoluciones por IRPF.

El titular de Hacienda adelantó que este ajuste de las retenciones "no es el último". Una vez que cncluya el estudio de la primera liquidación definitiva de la campaña del nuevo IRPF, se procederá a una nueva rebaja, que iniciará sus trámites parlamentarios antes de que acabe el año y beneficiará prioritariamente a los contribuyentes con menos capacidad económica.