En contra de lo manifestado ayer por la Asociación de Asesores Fiscales, el presidente de GESAF afirmó que el sistema "beneficiará a los contribuyentes que lo utilicen", al tiempo que rechazó que exista "inseguridad jurídica alguna".

En su opinión, el procedimiento de devolución rápida goza de suficiente cobertura legal, puesto que está expresamente previsto y amparado por la Ley 40/1998 del IRPF, y más concretamente en el artículo 81 de dicho texto normativo.

Día-Arias agregó que la devolución tributaria que pudiese resultar se realizará con varios meses de antelación, y que contendrá una comunicación que, pese a que su carácter es informativo, tendrá suficientes datos como para permitir al contribuyente solicitar la liquidación provisional a la Administración en el plazo de tres meses.

Precisó, por tanto, que la devolución rápida es una oportunidad "más rápida y sencilla" a la que los contribuyentes que reúnan ciertos requisitos pueden acogerse, sin excluir inguna otra opción. "Quien quiera velar por los derechos y defensa de los contribuyentes, como es obligación de los asesores fiscales, debe recomendar acogerse a este sistema", concluyó.