Según informa la organización en un comunicdo, los bombardeos registrados en los últimos días han provocado que las comunicaciones sean "casi imposibles".

"Todos los equipos vía satélite y todos los teléfonos móviles han sido requisados por las autoridades y se nos ha informado que tres personas que estaban en posesión de teléfonos Thuraya, prohibidos en Iraq, han sido ejecutadas", añade el comunicado.

DESPLAZADOS

En el norte de Iraq, donde continúa el desplazamiento de población, comienzan a registrarse carencias de combustible para us doméstico y para calefacción, falta de medicinas, necesidad de material de abrigo y escasez de agua potable y de sistemas adecuados de letrinización.

Asimismo, siguen sin registrarse movimientos de refugiados hacia los países vecinos, si bien mucha gente ha evacuado la ciudad de Dohuk, en el Kurdistán iraquí, en previsión de una inminente invasión de los ejércitos turco y americano.

En la frontera con Irán, la red Cáritas ha puesto en marcha un pequeño proyecto para prestar ayuda humanitaria a u total de 800 personas desplazadas, a las que se está distribuyendo paquetes unifamiliares de comida, bidones de agua potabilizada y letrinas móviles.