IRAQ. TODA LA PRENSAPLANTA A AZNAR EN EL CONGRESO
- Rato no se sienta en su escaño del Gobierno y sigue de pié desde el pasillo del acceso al Hemiciclo la pregunta de Zapatero
- Aplauso unánime desde la tribuna de prensa a los periodistas muertos sin que la Presidencia llame la atención
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Periodistas, cámaras y fotógrafos recibieron esta tarde en el Congreso de los Diputados al presidente del Gobierno, José María Aznar, con sus útiles de trabajo en el suelo y con fotografías de los dos periodstas españoles muertos en Iraq, Julio A. Parrado, del diario "El Mundo", y el cámara de Telecinco José Couso.
Casi un centenar de informadores esperaron a Aznar situados en el patio que separa los dos edificios del Congreso, de frente a su entrada y a uno de sus lados. Todos ellos con sus cámaras, micrófonos, grabadoras y cuadernos en el suelo, y con fotografías de José Couso con la leyenda "No le olvidéis", y de Julio A. Parrado bajo la frase "Nos queda su palabra".
Sólo un par de cámaras fueronlas encargadas de recoger las imágenes de los periodistas para facilitarlas después al resto de los medios.
Los periodistas permanecieron en los lugares en los que se habían colocado pese a reiteradas peticiones del jefe de Comunicación del Congreso, y después del comisario de la Cámara, para que se retiraran y dejaran pasar a los coches del presidente, a punto de llegar.
Finalmente se impusieron las explicaciones de los informadores, recordando que este tipo de concentraciones no son, afortunadaente, habituales, y con el compromiso de retirarse una vez que entrara el presidente.
Aznar llegó en el coche oficial y entró directamente al Congreso, sin apenas mirar al muro de periodistas que tenía enfrente y detrás de él, y se metió en las dependencias del Gobierno.
Los periodistas prorrumpieron entonces en aplausos, que se prolongaron durante varios minutos, acompañados por algunos diputados y trabajadores del Congreso de los Diputados.
Pero Aznar tuvo más sorpresas al entrar en el Hemciclo. Los reporteros gráficos, los únicos que pueden acceder al salón de plenos cuando hay sesión, le esperaban con sus cámaras colgadas. Aznar entró acompañado de varios ministros y de buena parte de su grupo parlamentario en tropel.
"QUE MORRO, QUE MORRO"
Las prisas de Aznar por entrar en el Hemiciclo le dejaron sólo, ya que él pudo pasar, pero el resto de los diputados quedó bloqueado por los gráficos. Ni siquiera había entrado aún la presidenta, Luisa Fernanda Rudi.
Una vez sentado en su ecaño, los reporteros gráficos le dieron la espalda y sacaron grandes carteles con la fotografía de José Couso. La imagen fue recogida por dos cámaras situadas en las torretas desde las que habitualmente trabajan los gráficos.
Buena parte de los diputados de la oposición se levantaron para aplaudir el gesto, acompañados de una multitud de periodistas que abarrotaban la tribuna de prensa, desde donde no se puede hacer ningún tipo de ostentación.
Esta vez los aplausos se prolongaron, sin ningún tipode toque de atención por parte de los servicios de la Cámara, hasta que los reporteros cedieron a las peticiones de la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, que no paraba de pedir a los diputados que ocuparan sus escaños para abrir la sesión, y que finalmente pidió el desalojo de los fotógrafos.
Unos instantes después de que comenzaran los aplausos en los escaños de la oposición y en la tribuna de prensa algunos diputados del PP aún atrapados en los pasillos de acceso a sus bancos se sumaron tmbién al homenaje a los dos periodistas, siguiendo el ejemplo del secretario general del PP, Javier Arenas.
Desde la tribuna de prensa se pudieron oir en ese momento algunos gritos de "qué morro, qué morro", que no frenaron los aplausos de algunos diputados populares.
Todos los fotógrafos abandonaron después el Hemiciclo, de forma que ninguno de ellos cubrió gráficamente la sesión de control al Gobierno. Por primera vez las torretas de los gráficos estaban desiertas en una comparecencia del presiente del Gobierno.
Una vez comenzada la sesión, y antes de que el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, tomara la palabra para formular su pregunta al presidente, los diputados de la coalición desplegaron una pancarta en la que se leía "Señor Aznar, pare la masacre. ¿Por qué matan testigos?".
Cuando ya finalizaba la pregunta de Llamazares entró en el Hemiciclo el vicepresidente segundo del Gobierno, Rodrigo Rato, y se quedó en el pasillo de acceso a los escaños, junto a una d las torretas de los gráficos, apoyado en la pared y con su cartera en el suelo.
Desde allí escuchó la pregunta formulada por el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y la respuesta de Aznar y, cuando finalizó el enfrentamiento dialéctico entre ambos, Rato cogió su cartera y salió del Hemiciclo.
(SERVIMEDIA)
09 Abr 2003
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