En una rueda de prensa, Alcaraz recordó que algunos juristas hablan ya de que un ataque sin ese respaldo legal podría ser considerado como una "agresión" sobre la población de Iraq, que podría ser denunciado ante esa Corte Penal.

Sin querer asegurar que zquierda Unida vaya a formular o promover esa denuncia, pidió que no se insulte a sus dirigentes por el simple hecho de recordar que se trata de un derecho, independientemente de que la denuncia fuera aceptada o no. "Es una posibilidad", reiteró.

Alcaraz explicó además que Izquierda Unida ha pedido la comparecencia del presidente del Gobierno en el Congreso de los Diputados para que diga en el Parlamento "lo mismo que se atreve a decir en los medios de comunicación", que la resolución 1441 de NacionesUnidas permite automáticamente una acción militar contra Iraq.

La comparecencia se ha solicitado por los artículos 196 y 197 del Reglamento del Congreso, es decir, con réplica de los grupos y votación de resoluciones.

Alcaraz retó al presidente y a su ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, a decir en el Parlamento y en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas lo mismo que sugieren ante los medios de comunicación, que no es necesaria una nueva resolución proque la 1441 autoriza el ataque. Recordó que esa resolución fue aprobada por unanimidad del Consejo de Seguridad con el apoyo, incluso de Siria, y eso fue posible porque todos tenían claro que ese texto no avalaba por sí mismo el uso de la fuerza.

"Ojalá tengamos que desdecirnos", dijo Alcaraz, pero la opinión de su grupo es que la posición de Estados Unidos, Reino Unido y España puede romper la Carta de Naciones Unidas y el marco de relaciones internacionales que ha regido en las últimas semanas.

A raíz del debate surgido pr los posibles intereses comerciales en Iraq, Alcaraz se mostró convencido de que no es ese el fondo del asunto ni el motivo de la posición de la llamada "vieja Europa", sino el intento de organizar el mundo a partir de ahora.

"El señor Aznar, que es ojo de lince, ha visto ese nuevo orden mundial y ha dicho yo quiero estar ahí, sin darse cuenta de que apuntarse a eso es apuntarse al horror", dijo Alcaraz. "La parte positiva", concluyó, "es la estatura moral de la vieja Europa, de la gente en la callede un Consejo de Seguridad que está luchando por sobrevivir".