Según esta emisora, el Estado Mayor de Operaciones de la Dirección General de la Benemérita tiene ya elaborado un proyecto de intervención en Iraq, similar al que este cuerpo viene aplicando en el territorio de Kosovo, en la antigua Yugoslavia.

El primer coningente de guardias civiles que sería enviado estaría compuesto por 120 agentes, de los que 110 corresponderían a los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) y Grupos de Acción Rural (GAR), 8 procederían de la Policía Judicial y otros 2 serían del Servicio de Información.

No obstante, según la Cope, el Gobierno pretende que la participación del Instituo Armado en la etapa post-Sadam Hussein sea aún mayor, ya que la intención sería que se desplegasen hasta 5.000 agentes, algo difícil de conseguir, ya que la grupación Rural de Seguridad de la Guardia Civil dispone de 1.800 miembros.

Si finalmente la Benemérita recibe el encargo del Ejecutivo de desplegarse en Iraq, los agentes realizarían un trabajo parecido al que ya desempeñan en otras misiones internacionales bajo control de la OTAN, ONU o UE, y que consiste en labores de policía civil, tráfico o asistencia técnica.